Uno de los mayores errores que cometen los operadores de opciones principiantes es comprar una opción call para ver si suena la flauta. Al fin y al cabo, la compra de opciones call sigue el mismo patrón al que estamos acostumbrados cuando operamos con renta variable tradicional: comprar barato, vender caro; en ese orden.
Las opciones son algo más complicado. A veces el activo subyacente se mueve en la dirección esperada, pero la opción no, o al revés. Las opciones con diferentes precios de ejercicio se mueven de forma disímil cuando el precio del activo subyacente sube o baja, así como cuando la opción se acerca a su vencimiento.
¿Existe alguna fórmula matemática para estimar cuánto puede moverse una opción cuando el activo subyacente hace lo propio? La respuesta es delta, que proporciona parte del motivo de cómo y por qué el precio de una opción se mueve del modo en que lo hace.
Hay muchas definiciones diferentes de delta, pero la explicación que sigue es la fundamental.
Delta hace referencia a la cantidad teórica en la que cambiará el precio de una opción por cada cambio correspondiente de una unidad (punto/dólar) en el precio del activo subyacente, suponiendo, eso sí, que todas las demás variables se mantengan inalteradas.
Ten en cuenta que delta se determina utilizando un modelo de precios determinad, de ahí la apreciación «teórica» en la definición anterior. Por lo tanto, aunque se trata del cambio de precio de la opción que espera el mercado, no existe garantía alguna de que la previsión sea exacta.
Toma como ejemplo una acción a $40, una opción de compra (call) at-the-money (ATM) a dos meses con un precio de ejercicio de $40 y un precio vigente de $3. Si la acción pasa de $40 a $41, siendo el precio de esta lo único que cambia, ¿cuánto puedes esperar que se mueva el precio de la opción de compra?
El precio de la opción de compra debería aumentar unos 50 céntimos para alcanzar $3.50. ¿El motivo? Uno de ellos sería el de buscar el delta de la opción, +0.50, que puedes encontrar en la cadena de opciones en la pestaña de cotizaciones e investigación.
Si nos basamos en la definición anterior, en caso de que la acción suba $1, el precio de la opción de compra debería subir aproximadamente lo que delta indica. Por lo tanto, debería pasar de $3.00 a unos $3.50.
Esto también funciona a la inversa. Si las acciones bajaran $1, la opción de compra debería bajar aproximadamente la cantidad de delta: 0.50 o 50 centavos, hasta un precio de $2.50.
Cuando trates de buscar la delta en Interactive Brokers, podrás observar que las opciones de compra (call) tienen una delta positiva.
Una forma de explicar esto es que los precios de las opciones de compra tienden a aumentar a medida que aumenta el valor del activo subyacente.
También observarás que las deltas de las opciones de venta son negativas. La razón es similar: las opciones de venta suelen aumentar su valor a medida que el valor del activo subyacente disminuye.
Estas son las señales delta que obtendrás al comprar opciones. Sin embargo, al vender opciones, las cifras delta se invierten. Las opciones de compra en corto tendrán un delta negativo; las opciones de venta en corto tendrán un delta positivo.
Delta es dinámico
¿Y si el valor del activo pasa de $41 a $42? ¿Se movería la opción de compra otros 50 centavos, o más o menos?
La respuesta es más de 50 centavos. Esto se debe a que la delta es dinámica: lo cerca o lo lejos que está el activo del precio de ejercicio determina cómo reaccionará la opción al movimiento del precio de este.
Dado que el movimiento de $41 a $42 significaría que la opción de compra está ahondando en una naturaleza in-the-money (ITM), delta ha de aumentar para reflejarlo. En este caso, se puede estimar que delta es de aproximadamente 0.60 o 60.
Si usamos delta para realizar los cálculos pertinentes, el nuevo precio de la opción de compra debería ser de unos $4.10 $ ($3.50 + $0.60). Las opciones de compra at-the-money (ATM), como las de nuestro primer ejemplo, suelen tener una delta de alrededor de 0.50 o 50 (por cierto, los operadores suelen eliminar el decimal y decir simplemente que estamos ante una delta de cincuenta).
Las opciones de compra in-the-money (ITM) suelen tener deltas de entre 0.50 y 1.00 (o 50 y 100), y las opciones de compra out-of-the-money (OTM) suelen tener deltas de entre 0.50 y 0 (o 50 y 0), obviamente nunca por debajo de cero.
Las opciones de venta at-the-money registran una delta en torno a -0.50 o -50. Las deltas de las opciones de venta ITM suelen oscilar entre -0.50 y -1.00 (-50 a -100). Las opciones de venta OTM suelen tener una delta que oscila entre 0 y -0.50 (0 a -50).
Delta para predecir el movimiento del precio a medida que se acerca la fecha de vencimiento
Echemos un vistazo a un ejemplo diferente:
Muchos de los que compran opciones por primera vez, en este caso, se inclinarían por un precio de ejercicio de 153 debido a que es la opción más barata. Sin embargo, si entiendes delta, verás aún mejor por qué es tan barata.
Es barata porque su delta es sólo de 0.05, es decir, esta opción de compra no se movería mucho ante un movimiento de valor de un punto en el activo subyacente. ¿Por qué es tan baja su delta?
Porque el precio de ejercicio está tan lejos del precio del activo subyacente que las probabilidades de que el activo subyacente termine por encima de los 153 dólares en 11 días son realmente escasas.
Aun experimentando un movimiento de un punto en el activo en el plazo de un día, la delta sugiere que el precio de la opción debería moverse apenas unos cinco centavos. Es más, esto es la teoría, por lo que en la práctica es muy posible que incluso no se mueva lo más mínimo.
Y sí, se moverá en función de delta, pero la opción habrá perdido, además, un día de valor temporal (establecido por theta). Si se tiene en cuenta el paso del tiempo (decay time), tendrás suerte si la opción sigue cotizando a 15 centavos.
Si se espera una subida de uno o dos puntos en el valor del activo subyacente antes del vencimiento, lo más probable es que las opciones de compra del precio de ejercicio 147 te beneficien más que la opción barata (precio de ejercicio 153).
¿Cuál es la moraleja de esta historia? Pues que es clave entender cómo se moverá una opción en relación con el precio del activo subyacente. Sin entender delta, es difícil saber qué opción te recompensará más en caso de que tu previsión del valor del activo subyacente sea correcta.